Tras realizarte una cirugía dental, es de especial importancia que sigas algunos cuidados. En este caso nos referimos al implante dental. El implante dental consiste en un procedimiento por el que se perfora en el hueso, y a pesar de que no existen muchas complicaciones durante el postoperatorio, hoy queremos comentar algunos cuidados básicos para que el éxito esté garantizado.
Antes de hablar exclusivamente de este tratamiento, es importante tengas en cuenta el cuidado dental diario para mantener unos niveles de salud óptimos y evitar sufrir las consecuencias de no cuidar tu boca.
¿Qué es un implante dental?
El implante dental es una de las opciones más conocidas cuando se pierde una pieza dental. Más concretamente, se trata de una cirugía donde en la primera fase se introduce un tornillo de titanio en el hueso maxilar, y en la segunda se colocan coronas o prótesis que se encargarán de sustituir en funcionalidad y aspecto a la pieza dental original.
La mayoría de los implantes son de titanio, esto se debe a que este material es el más compatible y permite la osteointegración (fusión de este con el hueso). Para aquellos que sean alérgicos al titanio o simplemente quieran otra alternativa a este material, se han desarrollado otros para realizar esta cirugía, como los implantes de circonio. Estos se diferencian en que el de titanio se realiza en dos fases, mientras que el de circonio solo requiere de una sesión.
Beneficios de realizarse un implante dental
Si te has decidido por el implante dental para recuperar piezas perdidas, debes conocer cuáles son sus beneficios. Entre otros, recuperar los movimientos y gestos en momentos tan rutinarios como comer, hablar, sonreír, etc.
- Mejoran la parte estética y la salud física y bucal.
- Recuperan en su totalidad la funcionalidad bucal, al no tener piezas perdidas.
- Masticar correctamente.
- Mejorar la digestión gracias a masticar adecuadamente los alimentos.
¿Qué es mejor un implante o una prótesis removible?
Dependiendo de la pieza perdida y de otros aspectos a tener en cuenta, puede ser que te aconsejen directamente un implante, aunque también te pueden ofrecer esta alternativa tan conocida: la prótesis removible. Pero qué es mejor ¿Un implante o una prótesis removible? Para ello haremos una comparación de estos dos tratamientos:
- A nivel estético: en este caso ambos tratamientos suelen cumplir las expectativas en cuanto a estética dental del paciente, pero a día de hoy los implantes ofrecen un resultado más natural.
- A nivel funcional: el implante dental suele responder mejor que las prótesis, esto se debe a que las piezas son fijas, no se desprenden ni se mueven, con una prótesis sí que se corre el riesgo de que eso pase.
- A nivel de adaptabilidad: las prótesis dentales requieren mayor tiempo que los implantes. Los implantes prácticamente funcionan como un diente más, pero esto dependerá de cada persona, de su capacidad de adaptabilidad y de las condiciones del hueso cuando se realiza el tratamiento.
- A nivel de durabilidad: en las dos intervenciones hacen falta cuidados y revisiones periódicas para conseguir una mayor durabilidad. En el caso de las prótesis, pueden llegar a durar alrededor de 10 años, y los implantes si se cuidan bien, toda la vida.
- A nivel de independencia: mientras que los implantes dentales son completamente independientes, las prótesis necesitan los dientes adyacentes para su colocación. Esto quiere decir que las prótesis removibles establece un límite de dientes que se pueden reemplazar, y que las piezas donde se colocan tienen que estar sanas y en perfecto estado.
Cuidados tras una operación de implante dental
Los cuidados tras una operación de implante dental dependerán de cada paciente, por eso lo mejor es que le preguntes a tu dentista. A pesar de esto, hay ciertas recomendaciones generales cuando se realiza una intervención de este calibre:
- Morder la gasa que se ha colocado tras la intervención.
- Colocar frío en las primeras 48 horas de manera intermitente (puede ser hielo, bolsas frías o cualquier producto congelado).
- Los alimentos que ingieras el primer y segundo día tras la intervención deben ser fríos, a temperatura ambiente y blandos.
- No hacer esfuerzos físicos muy pesados.
- En las primeras 24 horas no debes hacerte enjuagues, escupir ni cepillarte. De esta manera evitarás que se originen coágulos o hemorragias. Cuando pase el primer día, podrás cepillar suavemente la zona donde se ha hecho la cirugía.
- Si eres fumador, intenta evitar al máximo fumar, porque aumenta la posibilidad de padecer infecciones y alarga el tiempo de cicatrización.
- Evitar tocar el implante con la mano, para evitar infecciones. Tampoco se debe presionar con la lengua.
- En cualquier caso de que sufras alguna complicación o no sepas qué hacer, no dudes en consultar en la clínica donde has hecho la intervención y que te aconsejen qué tienes que hacer en cada momento.
Hasta aquí los cuidados que necesitas si procedes a este tratamiento. ¿Necesitas más información sobre los implantes dentales? Puedes consultarlo con nosotros aquí.